Detecta cualquier cosa,
en cualquier lugar.

Ya se trate de un único sensor o activo remoto, o de millones dispersos por todo el mundo, en tierra o en el mar, la ubicación y la escala ya no limitan el acceso a los datos que necesita.

Los asequibles módulos Myriota transfieren datos de forma segura directamente a la nube a través de nuestros nanosatélites, sin necesidad de pasarelas adicionales, torres u otras infraestructuras terrestres, lo que reduce los costes y simplifica el despliegue, el mantenimiento y la gestión de la red. Los módulos Myriota contienen una tecnología patentada que ahorra energía y proporciona la larga duración de batería necesaria para las aplicaciones IoT.

Cada uno de nuestra creciente constelación de nanosatélites orbita alrededor de la Tierra a una altitud de unos 600 kilómetros. Nuestra tecnología patentada nos permite escuchar simultáneamente un gran número de señales casi imperceptibles procedentes de los módulos Myriota. Esto significa que nuestra plataforma no sólo es escalable a miles de millones de dispositivos, sino que también reduce en gran medida el consumo de energía de los dispositivos en tierra.

Los mensajes son recibidos de forma segura por una red mundial de estaciones terrestres de satélite y procesados por un software alojado en la nube. Esto permite que la plataforma de Myriota se amplíe considerablemente y facilita la integración.

Los datos de sus módulos Myriota son accesibles a través de nuestra interfaz de programación de aplicaciones en la nube (API) desde cualquier lugar del mundo con conexión a Internet.